La vida va pasando y las fases en ella también. Llevo un año desconectado de la escalada y encenegado con mi nueva "enfermedad" que es la bicicleta de carretera. Y como la burra no da para todo pues aunque sigo entrenando en el rocodromo y haciendo alguna salida muy ocasional a roca, las grandes courses que iba realizando han quedado en un segundo plano, así como el blog.
Este verano pasado (2022) decidimos ir con nuestro hijo de 5 años a realizar una super aventura en la roca. El lleva desde los 3 añitos escalando y haciendo monte, de hecho el año pasado hizo su primera cima de entidad, el Pic de Sacroux (2675 mts) , sin ayuda, desde los llanos, el solito paso a paso. El verdadero peligro de esa actividad era no resbalarse con el charco de baba que iban dejando sus padres a cada paso.
Total que esta vía de "Sendero Límite" hará mil años fuimos de los primeros en probarla con ellos antes de que la terminaran, y recordábamos su sencillez, su buen equipamiento y el precioso entorno en el que estaba.
La logística es sencilla, doble cuerda, yo de primero e Isabel y Diego a los cabos fríos , mientras el titán sube, Isabel le ayuda y recoge el material. El sabe ya sacar las cuerdas de los mosquetones y la gestualidad la tiene muy bien interiorizada haciendo pasos que yo en mi escalada troglodita ni sueño con hacer ya. Es lo que tiene empezar a escalar y a caminar casi a la vez.
Nos preguntan muchos amigos que como lo hacemos para motivarlo y nuestro truco es el siguiente. Es el hobbie familiar, nos ve disfrutar a tope, reir, estar con amigos, siempre es emocionante, mucho refuerzo positivo y aunque a veces hay que darles un empujón, no es una obligación. Con el esquí estamos haciendo igual y ojo a ver quien coge a este dentro de unos años. También el entorno familiar ayuda con mis sobrinos y mi hermano escalando desde siempre, el pedigrí montañero de las abuelos maternos, el entorno de amigos el Tio Chema, los tios Alex y Ele, Bartolito...
El resumen de la actividad es un día de 10, con risas y muchas fotos. Premios, merendola y de recompensa a la bajada un Mcdonals (que es veneno) pero a los críos en general y no tan críos les encanta y lo reservamos como "premio" para las ocasiones de actividad intensa. Días de esquí, de montaña, de escalada, acaban en Huesca dandole al diente.
Activad recomendable para hacer con peques con un pequeño nivel, experiencia que queda en la retina, sobre todo de los papás. Más regueros de baba salvajes...