" Totó, me parece que ya no estamos en Kansas." Dorothy de el mago de Oz.
Después de pasar una noche relativamente confortable en el refugio FAM de Respomuso, nos levantamos a las 7 am. Lo de relativa viene porque me dejé los tapones para los oídos en casa y durante una hora de reloj alguien decidió roncar la octava de Beethoven en Fa sostenido. De los cinco que estábamos ya no queda nadie. El francés y los dos chicos han marchado temprano, así que con la calma bajamos a desayunar con los obreros que están reformando las partes dañadas por el alud del año pasado.
Desayuno justito para mi gusto, el único pero que le puedo poner a nuestra estancia, es lo que hay dadas las circunstancias. Preparamos todo muy tranquilamente. Queremos que la nieve transforme para la subida, pero también para la bajada. Esta noche ha habido buen rehielo a cotas bajas. Nos despedimos del guarda y de la gente del refugio y cargados con todo otra vez. Como pesa!. Comenzamos la ruta rumbo al barranco de Respomuso, ruta común con el Balaitus por la brecha de Latour.
Desayuno justito para mi gusto, el único pero que le puedo poner a nuestra estancia, es lo que hay dadas las circunstancias. Preparamos todo muy tranquilamente. Queremos que la nieve transforme para la subida, pero también para la bajada. Esta noche ha habido buen rehielo a cotas bajas. Nos despedimos del guarda y de la gente del refugio y cargados con todo otra vez. Como pesa!. Comenzamos la ruta rumbo al barranco de Respomuso, ruta común con el Balaitus por la brecha de Latour.
Salimos pues a las 8.30 am, dirección Norte por el interior del barranco, que guarda bastante nieve pero muy dura, eso sí. Después de un par de resbalones decidimos poner cuchillas, y son más que necesarias. A la marcha y poco a poco vemos bajar el sol a nuestra altura e iluminar casi todas las vertientes. Subimos unas 150 mts por esta ruta y giramos a la izquierda por una pala de inclinación media con la arista de Bondidier a la vista. Deberemos de pasar a su izquierda y luego subir paralelos a ella hasta el corredor final.
El sol ya nos calienta y poco a poco va transformando la nieve. Un gozo lo bien que agarra en comparación con el día anterior. Estamos en cota 2450-2500 mts cuando me quito las cuchillas. No se pueden pedir mejores condiciones. Félix es más cauto y las mantendrá hasta el final. Más por comodidad mental que por necesidad.
Don Feliz y Don Musales |
Se ve la cima Central a la derecha y la subida franca y cómoda que tenemos aún por delante. Ya hay cobertura de móvil y me comunico con mi pequeña. Seguro le pone contenta saber que estamos bien y que estamos disfrutando. Día excepcional sin viento y con sol. Hay aludes de purga por todos los lados de las nevadas de la semana pasada pero la montaña está muy estable.
Vamos disfrutando cada uno de las vueltas de María y de los giros más amplios. Yo siempre buscando las laderas con más sol y nieve más transformada y Félix buscando más las zonas que han recibido menos con nieve más dura y mas cómoda para las cuchillas.
Un par de paradas técnicas para hidratarnos y comer calorías y seguimos disfrutando de la subida a un ritmo muy tranquilo pero muy constante, charrando cuando nos cruzamos y en nuestros pensamientos cuando las líneas que trazamos se separan. La montaña está hoy que enamora con solo mirarla y el Pirineo nos está regalando estampas invernales en Mayo.
Poco a poco vamos ganando metros y llegamos foqueando tranquilamente hasta cota 2900 mts aprox. Es momento de encarar la canal que sale a la arista cimera. Por seguridad lo haremos con crampones y piolet que para eso los hemos porteado. Aunque se podría haber hecho posiblemente con esquíes.
Poco a poco vamos ganando metros y llegamos foqueando tranquilamente hasta cota 2900 mts aprox. Es momento de encarar la canal que sale a la arista cimera. Por seguridad lo haremos con crampones y piolet que para eso los hemos porteado. Aunque se podría haber hecho posiblemente con esquíes.
Sacamos pues el material duro y colocamos los esquíes en la mochila ya sin focas que no volveremos a poner, quien sabe si ya hasta el año que viene. Me voy a colocar los crampones y parece que no encaja pego un tirón muy fuerte y desmonto la pieza trasera. Ole mis huevos. Me he cogido los de Isabel y los he forzado hasta desencajarlos. Bueno seguro que puedo arreglarlo. Ahí estamos mas de 20 minutos intentándolo pero el señor Peltz hace las cosas a conciencia y necesitare una herramienta en casa para arreglarlo. No podemos con lo que disponemos. Así que harto ya, decido subir sólo con un crampón y el piolet. En plazas peores hemos toreado.
Afrontamos los últimos 100 metros con decisión. Me abro yo la huella porque no puedo aprovechar la hecha sin un crampón, me resbala el pié. Así que debo de buscar nieve virgen y cuanto más profunda mejor. Eso desgasta pero se disfruta igual. China chana, con algún descanso en medio, llegamos hasta la arista cimera. Se nos regala una visión del Pirineo excepcional. De hecho se ve el Posets y hasta el Aneto, obviamente el Vignemale, Norte del Taillon, Casco, Marboré, Cilindro, Infiernos más cerca, Garmo... pero sobre todo el gran Balaitus.
Dejamos las mochilas y nos dirigimos hacia la cima Central (3049 mts) que alcanzamos sin problemas. Selfie cimero y alguna foto y vuelta hacia las cosas. Contrariamente a lo que suelo hacer comemos aquí mismo. Me gusta salir de las cimas los antes posible. Hace un día espectacular, no demasiado fresco y sin una gota de aire, eso me convence para quedarme un rato. Félix disfruta de su Couos Couos que ha traído de casa. Yo me como el bocata de Jamon de Teruel con queso de Albarracín que me ha preparado mi padre. Tragos de agua, alguna foto y llamada incluso. Aquí arriba hay bastante buena cobertura.
Una vez repuestos nos cargamos todo a la espalda y nos dirigimos hacia el Frondiellas S (3004 mts) y hacia la bajada a la cara oeste. Hay que pasar la perpendicular de la cresta de Wallon y bajar decididamente hacia la cubeta. Una foto arriba y en momento de descender. De momento ir solo con un crampón no ha sido un problema. Esperemos que siga así.
Bajamos con la calma y sobre todo con seguridad. No pasamos ningún problema ni apuro. La nieve en esta cara está costra, cosa que me hace temer un duro descenso. Pero nada más lejos de la realidad. Una vez juntos abajo volvemos coger las tablas y a guardar el piolo y los crampones. Reorganizamos la mochila para ponerla lo más cómoda posible y encaramos una de las bajadas con mayúsculas del Pirineo. Son algo más de 800 metros hasta el ibón bajo de Arriel y luego intentaremos estirar la bajada todo lo que podamos y vaya que si pudimos. Según el gps más de 1100 mts de descenso.
Me marco los primeros giros en nieve dura pero con un poquito de polvo que se deja hacer bastante bien. Hay una huella de bajada pero va pegada a la arista de Wallon así que supongo que se dirigían o al refugio de Arremoulit o a Larribet. No es nuestro camino, nosotros debemos salvar los bloques centrales esquiando con tendencia a la izquierda. La nieve en un momento dado cambia de dura a increíblemente buena. Mejor dicho buenísima y nos permite disfrutar de la mejor bajada de nuestra vida y esta vez me incluyo. Nunca había disfrutado tanto esquiando, giro tras giro, aprovechando las palas, encarando rampas, jugando con los lomos... Estamos gozando tanto que ni paramos prácticamente hasta el ultimo giro decidido a izquierdas para bordear el ibon Bajo, buscar la otra orilla y seguir por el primer desagüe. Aquí abajo tenemos que esquiar por unos cuanto aludes pero se gestionan lo más elegantemente que podemos.
Seguimos por nieve y pasamos el segundo ibón y la represa esquiando. Salvo unas rocas que debemos descalzarnos y pasar andando apuramos la bajada pasando por lenguas de nieve y por donde podemos pero disfrutando, saltando, marcando giros por el barranco de Arriel, uno tras otro hasta cota 1900 justo encima de la cascada y donde el sendero pasa el barranco y enlaza con la GR. Es decir hasta el final prácticamente del todo.
No tengo palabras para definir esta bajada y esta ruta en general. Increíble es poco. Viene recomendada en la página 120 del libro de Jorge García-Dihinx, "Rutas con esquíes por el pirineo Aragonés" volumen II. Y es una gran recomendación no cabe duda.
Ahora toca la parte dura. Volver a sacar las zapatillas de trekking y portear hasta el coche con todo el peso a la espalda. Dios mío que dolor. Llegamos al paso del Pino y a la cascada de Arriel. Otros años si nos seguís habréis leído que en este punto nos tuvimos que dar la vuelta una vez, y el año anterior en la subida al Balaitus nos mojamos hasta la cadera. Este año de momento se puede pasar andando cómodamente.
http://laaventuraesmireino.blogspot.com.es/2013/06/ascension-al-balaitus-o-pico-os-moros.html
http://laaventuraesmireino.blogspot.com.es/2014/06/ascension-al-pic-de-soques-2716-mts-8.html
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Ya estamos en el coche y es momento de recoger todo y volver a la rutina del día a día. Me esperan mis grandes amores abajo y tengo muchas ganas de verlos. Esta ruta será repetida con la gran Isabel lo prometo y con quien quiera venir otro año sin duda alguna. Se merece todo el esfuerzo de subida y de porteo por lo que se disfruta la bajada. Me atrevería a decir que es la mejor bajada de mi vida incluyendo pista, fuera de pista, travesía y los años que estuve en el lado oscuro (tablero ya sabéis).
Espero que leyendo esta reseña hayáis disfrutado al menos la mitad de lo que yo lo he hecho haciéndola. Un gran abrazo a Félix ha sido un placer infinito de principio a fin. Mil gracias a Javi Abajo y a sus compinches por darnos el último empujoncito. Y sobre todo gracias a Isabel por hacerme sentir tan feliz cada minuto del día y disfrutar desde la distancia cuando no puede hacerlo en persona.
Nos vemos por ahí arriba más pronto que tarde amigos.