"No importa el tamaño del problema, importa la determinacion para resolverlo".
Este finde tenemos que subir a Liguerre a ver el pueblo para futuros eventos :), así que aprovechando el viaje encontramos por internet unas reseñas de escalada en la zona (Reseñas Liguerre). Hasta que vengan los padres de Isabel y el señor con el que hemos quedado para hacer la visita, aprovechamos para acercarnos al sector de la Corona, que pega algo de sombra por la tarde (orientación Este) y nos apetece apretar un poco, que ya hace días. El sol aquí cae de justicia, no tiene nada que envidiar a Morata o a Riglos aunque esté tan cerquita de peña Montañesa... No en vamos está a apenas 450 mts de altitud.
Aparcamos el coche cerca del cruce hacia Liguerre en la A-138 carretera que lleva a la Fueva. Llegar a la pared no tiene perdida, hay una marca en la carretera de un sendero que te lleva desde liguerre (azul y amarilla creo) y luego es cuestión de seguir los hitos y el camino más evidente que veamos.
Nos decantamos por el sector de la izquierda donde hay vías más asequibles, para bajar el pedazo de bocata que nos hemos comido a orillas del embalse de Mediano.
Sector Corona parte Izquierda |
No tenemos demasiado tiempo. Así que empezamos por la más sencilla para calentar un poco los dedos y seguiremos con las que podamos encadenar hasta la hora de bajar. Es decir, de izquierda a derecha.
- Iniciacion IV+ (entrada lavada de V/V+) pero bien asegurado el paso. Puedes chapar desde abajo así te evitas sustos tontos.
- Bala Perdida V+ Mantenido. La entrada si no la escaqueas es apretona para ser un quinto. Hay que superarse en una grieta horizontal con poco apoyo de pies. El resto a disfrutar de buen canto por el espolón.
- Sin tregua V+. Vía de buen canto, que alterna pasos con zonas de paseo. Divertida.
- El chupete de tete. 6a+. Entrada fina y final, lo del medio canto fácil y avispero.
En esta ocasión Isabel encadenó de primera todas como una reina, aunque en la del espolón escaqueó la entrada. Pero con una solvencia y una tranquilidad impresionantes. Es una maravilla ver como disfruta en la roca y como le pega. Las horas de tablero este invierno se notan. Yo como siempre chapucero y poco estético en mis movimientos, pero encadenando todo bastante bien. Hay gente que nace con el don de la plasticidad y del equilibrio y otros que somos más gorilas... yo soy gorila gorila...
En la vía del "chupete de tete" una vez que pasas las dos o tres primeras chapas, la entrada dura vamos, hay un canto donde respiras y dices "ahora si"... hasta que asoman las avispas que deben vivir dentro y te cosen a picotazos. Yo me llevé uno en el hombro antes de pegar un salto y volar como un grajo para abajo.
Después del contratiempo se nos echó la hora encima y tuvimos que irnos aunque nos hubiera gustado probarnos todas las vías. Zona tranquila, a la sombra por la tarde y con unas vistas maravillosas del pantano.
La verdad es que me siento una de las personas más afortunadas de la tierra por poder compartir y disfrutarlo todo con la persona que más feliz me hace del mundo. Verla reír de orgullo cuando encadena una vía, gritar cuando fuerza en un paso... me llena de alegría. Estar en nuestro medio juntos es algo casi mágico. Si además estamos con vosotros, en persona o a través del ordenador, es mucho más mágico todavía. Hay que Disfrutar de las pequeñas cosas porque la vida son un montón de trocitos pegados uno junto a otro. Y el collage se completa muy rápido. Y lo que no nos guste, lo despegamos y seguimos añadiendo cosas buenas que para lo malo siempre hay tiempo.
Un saludo a todos y nos vemos en el monte más pronto que tarde :)