Peña del Reloj, Morata de Jalón vía Concepción García (D, 100 mts, Vº).

" Lo difícil no es llegar a la cima, es no parar nunca de subir". Walt Disney.

Tenemos una mañana libre ahora que ha venido el frío, pero todavía no hay suficiente nieve para subir a darle a la trave. Le debemos unas escaladas al fanático de mi sobrino. Desde que lo apuntamos el año pasado a la escuela de escalada de Montañeros de Aragón no piensa en otra cosa. Y como está sacando buenas notas, pues hay que llevarlo a escalar. Le damos a elegir entre apretar en la gran placa o hacer una vía varios largos. Elige lo segundo y decidimos acercarnos a Morata a darle a alguna vía equipada. Descartamos Riglos porque dan mucho riesgo de lluvia. Queremos que disfrute y aprenda cosas, así que nos decantamos por la gran clásica de la peña del reloj, la vía Concepción García.

La vía supera en cuatro largos de forma ingeniosa las dificultades de la pared, por buena roca, aunque desde abajo parezca lo contrario y de forma mantenida en el Vº. Equipada con parabolts (no demasiado abundantes) recomendable llevar un par o tres de cacharros para equipar algún paso que queda algo flojo. Nosotros no lo llevamos y sin problema, pero hubiera sido más seguro haber asegurado un poco más la cosa.

La tropa goofy.

Madrugamos un domingo pero que hay que bajar a comer con la "mia mama", pasamos a recoger al pequeño por casa de mi hermana y rumbo a la pared. Parada técnica en el bar "La Plaza", cafecicos antes de empezar y rumbo a la Peña del Rejoj. Visitamos los olivos Isabel y yo, algo se mueve y no lo podemos detener jejejejeje, mientras mi sobri se equipa en el coche. No sabe aún que esos gramos de menos son los que dicen las leyendas mas escatológicas que te hacen encadenar. XD. Preparamos todo el material, no revisamos los unos a los otros, un último ojo a la reseña y a comenzar la aventura. Hoy yo estoy muy enchufao y eso que ando acatarrado.

L1: 30 mts. V-. Comienza por una placa tumbada en dirección al marcado diedro-chimenea. La primera chapa aleja, pero son pasos de III hasta el primer seguro. Como referencia hay dos parabolts sin chapa al inicio de la vía. La segunda no se ve, pero está metida en el diedro, está ahí no lo dudéis. Pasos más o menos mantenidos pero cómodos y aunque parece que alguna roca va a saltar, nada más lejos de la realidad, las cientos de cordadas que han pasado por aquí han limpiado todo. Sigo subiendo y disfrutando de la escalada. Reunión incomoda, dos parabolts y dos spits al lado. Queremos hacer todos los largos para que disfrute el joven escalador, pero al menos estos dos son empalmables, aunque la  cuerda va a rozar mucho mucho. Así que aquí que me cuelgo y aquí que me hago mi casa. Curioso largo.

L2: 25 mts. V-. Una vez todos aquí, cambiamos los trastos y arranco el segundo largo por no andar cambiando nudos colgados como pajaros de un cable de alta tensión. Continúa por la continuación de la chimenea, un par de pasos disfrutones hasta que acaba en un off-width, de generosos agarres y luego a una placa moratera inclinada de bonitos movimientos y algún espino, hasta que poco antes de la reunión relaja. Dos parabolts y un spit en una cómoda repisa es lo que nos espera arriba. 

L3: 20 mts. V. Toca cambio, Isabel coge la cabeza de la cordada. Bonito y corto diedro, un poco lavado, pero bonito de todas formas. Isabel suda lo suyo, porque no encuentra un cazo en la pared de la derecha que facilita totalmente el paso, y que encuentra el sobri. Salida debajo de un pequeño resalte. Aquí no vendría mal poner debajo un empotrador, para asegurar el paso, sencillo pero si se rompe un agarre ni Adam Ondra es capaz de evitar la caída. Con facilidad lo supera y grita reunión. Después el titán de David sube de manera elegante. Se le ve disfrutar como a nosotros con él. 

L4: 25 mts. V-. Comienza con un paso en travesía a la izquierda para coger otra pequeña chimenea, equipo el paso con un cordino, hasta un parabolt. Pasos con todos los agarres del mundo para disfrutar. Después una pequeña zona de transición y a por los últimos metros, más montañeros y de cómoda realización pero escasos de seguros, otro par de empotradores (friend o fisureros) hubieran estado de lujo. No es que sean necesarios, que no lo son, pero estamos en lo de siempre, sobrar no sobran.

Selfie escalador :)

Y así como habíamos llegado, humildes pero con una sonrisa por bandera alcanzamos los tres la cima de la Peña del reloj. Nos quitamos los gatos y un super abrazo. Que contentos estamos, las escaladas en familia son lo mejor. Mi sobrino ha disfrutado seguro que tanto como nosotros o más. Que orgullosos estamos de David!. Recogemos todo, plegamos las cuerdas, repasamos el equipo..., un trago de agua, un potito y comenzamos el descenso. El tiempo ha respetado hasta ahora pero se acercan nubes negras por el fondo. Seguimos unos mojones hasta una torrentera que tras un rápido descenso nos lleva al coche. Un par de culetazos por el camino y nada más llegar abajo comienza a llover. Parece que hubiéramos medido las horas.

Cada vez que pasamos un día como éste intento disfrutarlo al máximo, la vida me está dando muchas cosas que no soñaba con tener, y me gusta. Me gusta ser feliz, vaya que si me gusta!, y en las pequeñas cosas reside la felicidad. Y estos pequeños momentos, estas escaladas, estas montañas viajaran en mi maleta para siempre. Sed felices e id encerando las tablas que viene la nieve!!!!!

La cima donde todos estamos  contentos aunque alguno no sonria nunca jajajajaja